El Ayuntamiento de Sevilla ha querido reconocer la labor académica e investigadora, así como el trabajo de divulgación, de las catedráticas y alumnis de la Universidad de Sevilla, Lola Pons y Amparo Graciani, otorgándoles la Medalla de Sevilla.

Lola Pons es catedrática, perteneciente al Departamento de Lengua Española, Lingüística y Teoría de la Literatura, e integra el grupo de investigación La Lengua Española en su Historia. Actualmente representa al Ayuntamiento en la Comisión Académica para la Conmemoración de los 500 años de Elio Antonio de Nebrija y "una de las voces más influyentes, leídas y escuchadas de la filología española".

Amparo Graciani, catedrática de Construcciones Arquitectónicas y doctora en Historia del Arte, también forma parte del grupo de investigación de Conservación Preventiva del Patrimonio Construido. Divulgadora del Patrimonio construido, Graciani trabaja con especial interés en promocionar el centenario de la Exposición Iberoamericana de 1929.

En la cita también se galardonó con la Medalla de Sevilla a Cristina José Cruces Roldán, catedrática de Antropología Social de la Universidad de Sevilla, una de las primeras académicas expertas en flamenco, y a Víctor Pérez Escolano, catedrático emérito de la US y referente internacional del urbanismo.

La entrega protocolaria de las distinciones tuvo lugar con motivo del 30 de mayo, día de San Fernando, patrón de la ciudad hispalense. En este acto se nombró Hijas Predilectas de Sevilla a la actriz María Galiana y a la bailaora Manuela Carrasco, así como 'Hijo Adoptivo' al pueblo de Ucrania por la invasión rusa. También se reconoció con la Medalla de Sevilla a otras tantas personalidades de diferentes ámbitos.